Este jueves, el centro de Buenos Aires fue escenario de una multitudinaria manifestación protagonizada por más de un centenar de sindicatos y organizaciones sociales. La movilización, convocada por el Frente de lucha por la soberanía, el trabajo digno y los salarios justos, tuvo como principal foco protestar contra las medidas económicas impulsadas por el presidente Javier Milei y el rol del ministro Federico Sturzenegger.

Un reclamo directo al Ministerio de Desregulación

La marcha tuvo como destino el edificio del Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, encabezado por Sturzenegger, quien ha sido señalado como uno de los principales articuladores del programa económico del gobierno libertario. Las críticas se centraron en la política de ajuste fiscal promovida por Milei, especialmente en su propuesta de “déficit cero”, que para los manifestantes está desmantelando el aparato estatal.

Durante la protesta, las consignas apuntaron directamente al Ejecutivo por el impacto social de las reformas económicas. “Las decisiones en materia de trabajo y producción, hoy dirigidas por el ministro Sturzenegger, colocan al pueblo trabajador ante una de las peores degradaciones sociales y económicas que nuestra Patria haya conocido”, expresaron los gremios en un comunicado conjunto.

Amplio operativo de seguridad

Ante el anuncio de la movilización, el gobierno activó un operativo de seguridad que incluyó vallas metálicas, agentes antidisturbios, escudos y bastones para blindar el edificio del ministerio y reforzar el control del espacio público.

Esta acción forma parte de una política más amplia del Ejecutivo de contener las manifestaciones sociales, en medio del creciente malestar por los recortes presupuestarios y las decisiones que afectan áreas sensibles como la salud, la educación y la infraestructura pública.

Sectores movilizados y ejes de la protesta

Entre los convocantes se encontraban sindicatos del transporte, la administración pública, la industria manufacturera, y organizaciones de trabajadores informales y personas desempleadas. Todos unidos en rechazo al modelo económico que impulsa el oficialismo.

Además, denunciaron el endeudamiento con el Fondo Monetario Internacional, la “entrega de recursos al poder económico extranjero” y el intento del Ejecutivo de imponer un tope a las negociaciones salariales, lo que consideran un ataque directo a los derechos laborales.

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En el documento leído durante la protesta también se criticó el “brutal ajuste” en sectores clave como la educación, la ciencia, la salud y las políticas sociales, señalando que estas decisiones agravan aún más las condiciones de vida de millones de argentinos.