Una advertencia, una traición y una nueva jugada: lo que viene en el próximo capítulo de Los Casablanca
El capítulo 137 de Los Casablanca traerá fuertes tensiones entre Alexandra y Tomás, un cara a cara de Iván y Miranda y jugadas de poder.
El capítulo 137 de la teleserie nocturna de Mega, Los Casablanca, que se emitirá el próximo lunes, traerá giros clave en la trama y nuevas disputas entre sus protagonistas, preparando el terreno para una recta final cargada de conflictos.
Alexandra desafía a Tomás
En medio de la creciente rivalidad, Tomás (Nicolás Poblete) decide reinstalarse en la casa familiar. Sin embargo, Alexandra (Mariana Di Girolamo) no cede terreno y le deja en claro que no piensa dejarse intimidar.
“Tomás, mira, puede que logres algunas cosas a nivel material, pocas. Pero Tormento y yo vamos a estar juntos, te guste o no”, le advierte con firmeza la heredera de los Casablanca.
Iván enfrenta a Miranda
Mientras tanto, Iván (Pancho Melo) descubre que Raimundo (Francisco Reyes) le propuso matrimonio a Miranda (Sigrid Alegría) y que ella aceptó. Decidido a obtener respuestas, la cita para conversar.
Sin anticipar lo que ocurrirá, Miranda acude a la reunión y le sigue el juego: “¿Ya no quieres viajar conmigo? O sea, cuando entraste a mi departamento estabas muy entusiasmado, dijiste que estabas cansado, que querías cambiar, que querías abandonarlo todo y dejar tranquilo a tu hermano”.
Iván no se deja engañar y le lanza directamente: “A tu novio querrás decir. ¿O vas a ser tan cara de raja para negar que Raimundo te pidió matrimonio y tú le dijiste que sí?”.
Juan Pablo busca quedarse con el puesto de Tomás
En otro frente, Juan Pablo (Jorge Arecheta) llega hasta la oficina de Raimundo para sembrar dudas sobre el desempeño de Tomás en la empresa.
“A mí me parece que Tomás no va bien encaminado con las cuentas que lleva… Los mexicanos, por ejemplo. Ese acuerdo tendría que estar firmado hace mucho tiempo y Tomás ha estado aquí marcando el paso”, le comenta a su suegro.
Raimundo sugiere que él podría hacerse cargo, pero Juan Pablo no pierde la oportunidad y responde: “O yo”, dejando en evidencia su ambición por quedarse con el puesto.