“Estaba sentado con mi hija en esta habitación. Pero esto ya no es un hogar, ya no hay habitación. Es como un infierno” este es el triste relato de una de las personas que está en Kiev.
Similar es la situación que se vive en zonas como Irpín y Bucha, a unos kilómetros de la capital, en donde otra de las victimas narró su experiencia tras los días de bombardeos: “Estábamos escondidos en el sótano y vinieron hacia nosotros. Salimos como estábamos, solo trajimos nuestros documentos”, sostuvo.
¿Qué dicen las autoridades locales?
Vadym Boichenko, alcalde de Mariupol, una ciudad al sur de Ucrania, denunció que el pasado miércoles había sido el día más violento de la semana.
La autoridad expresó que la “infraestructura crítica ha sido dañada. Estamos sin luz, sin agua nuevamente. Seguimos sin calefacción”.
En paralelo, este jueves el presidente Volodímir Zelenski pidió a occidente que aumente su apoyo a Kiev y advirtió que en el caso de que su país sea derrotado, Rusia atacará a los países bálticos y al resto de Europa, informó Meganoticias.
