La cruda historia tras la foto símbolo del hambre en Gaza: “Lo hice mientras yo mismo pasaba hambre”
La imagen de un niño desnutrido en Gaza revela la magnitud de la crisis humanitaria bajo el bloqueo y la falta de ayuda humanitaria.
En medio de un campo de desplazados al este de Ciudad de Gaza, el fotógrafo Ahmed al Arini captó una imagen que ha dado la vuelta al mundo: la de Mohamed Zakariya Ayyoub al Matouq, un niño de un año y medio que apenas pesa seis kilos. Su cuerpo, visiblemente afectado por la desnutrición, se ha convertido en un reflejo del hambre y la falta de recursos que golpea a la población tras más de cuatro meses de bloqueo impuesto por Israel.
En brazos de su madre, Mohamed lleva una bolsa de plástico negra en lugar de pañal, ya que este producto básico escasea y su precio puede alcanzar los 10 shekels —cerca de tres dólares—, un valor inalcanzable para la mayoría de las familias gazatíes.
Un retrato del hambre en Gaza
El propio Al Arini explicó: “Lo fotografié en el interior de una tienda de campaña para familias desplazadas, en medio del hambre, el dolor y una grave escasez de leche de fórmula y pañales”. Según relató, el menor había pasado de nueve a seis kilos en pocos meses. “Me sobrecogió el dolor al ver lo demacrado que estaba. Hice estas fotos mientras yo mismo pasaba hambre”, añadió el reportero gráfico.
De acuerdo con The New York Times, Mohamed nació con problemas de salud que afectaron su desarrollo cerebral y muscular, pero su estado empeoró gravemente en los últimos meses ante la falta de alimentos y atención médica. Una clínica local confirmó que padece desnutrición severa.
Una crisis que afecta a miles de niños
La situación de Mohamed es solo un ejemplo de la emergencia humanitaria en la Franja. El Unicef estima que más de 320.000 niños menores de cinco años enfrentan riesgo de desnutrición aguda en Gaza. Desde octubre de 2023, cerca de 90 menores han muerto por esta causa, según el Ministerio de Sanidad local.
El sistema internacional Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria (IPC) advirtió que el 81% de los hogares no tiene alimentos durante varios días y que un 96% pasa hambre en repetidas ocasiones cada día. Nueve de cada diez familias han debido arriesgarse para conseguir comida o buscarla entre la basura. Entre abril y mediados de julio, más de 20.000 niños fueron ingresados para tratar la desnutrición.
Posiciones encontradas y bloqueo de ayuda
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha acusado a Hamás de difundir cifras e imágenes “escenificadas o manipuladas” para exagerar la percepción de la crisis. Según un comunicado oficial, “aunque la situación en Gaza es difícil e Israel ha estado trabajando para garantizar la entrega de ayuda, Hamás se beneficia de intentar alimentar la percepción de una crisis humanitaria”.
El ejército israelí anunció recientemente la apertura de “rutas seguras” para permitir la entrada de ayuda, aunque Naciones Unidas sostiene que estas medidas son insuficientes para prevenir una hambruna masiva y denuncia trabas burocráticas y de seguridad.
Vivir y trabajar bajo asedio
La realidad para los periodistas locales es igualmente compleja. Israel mantiene un veto a la prensa internacional, salvo visitas controladas por sus autoridades. Según el Sindicato de Periodistas Palestinos, más de 230 reporteros han muerto desde el inicio de la guerra.
Al Arini, quien colabora con agencias internacionales, perdió su hogar en Yabalia tras un ataque y ahora vive en la capital. “Trabajar como fotoperiodista en este contexto me llena de dolor y me agota. Cubres la guerra y el asedio mientras estás hambriento, agotado e incapaz de proporcionar alimentos a tu propia familia e hijos”, lamentó.
Pese a ello, asegura que continuará documentando lo que ocurre: “Quizá el mundo se haya acostumbrado a estas escenas. Llevamos casi dos años conviviendo con la muerte, la destrucción y el asedio. A nadie parece importarle lo que están soportando los civiles y la gente inocente de Gaza”. Su esperanza es que sus imágenes “puedan ayudar a detener el genocidio y a poner fin a esta dolorosa guerra”.