“Te lo dije, el que ríe último, ríe mejor”: camionero mata a su hijo de 4 años y deja escalofriante carta a la madre antes de suicidarse
Camionero argentino asesinó a su hijo y luego se suicidó tras anunciar la tragedia en redes sociales.
Argentina amaneció impactada por un brutal caso ocurrido en la ruta 60, a la altura de Huanguelén, en el sudoeste de Buenos Aires. Gustavo Suárez, camionero de 48 años, asesinó a su hijo de 4 años y posteriormente se quitó la vida, dejando una carta en redes sociales en la que responsabilizó a su expareja.
La tragedia que estremeció a todo un país
El hecho, catalogado por las autoridades como parricidio seguido de suicidio, tomó un matiz aún más inquietante al confirmarse que Suárez anunció su decisión minutos antes a través de su estado de WhatsApp. Según Clarín, el hombre publicó un largo texto dirigido a la madre del niño.
Antecedentes previos y falta de medidas efectivas
Pese a que existían denuncias anteriores, una resolución judicial señalaba que no había “riesgo extremo”, algo que hoy vuelve a poner en discusión los criterios utilizados en este tipo de evaluaciones.
El aviso desesperado y el hallazgo del camión
Al leer la carta, la mujer alertó de inmediato a la policía argentina, que en pocos minutos encontró el camión Mercedes Benz estacionado en la ruta. Sin embargo, al llegar se encontraron con el peor escenario imaginable.
El fatal desenlace
Los oficiales hallaron el cuerpo del camionero con un disparo en la cabeza. A su lado, su hijo Francisco agonizaba tras recibir un impacto de bala. El menor fue trasladado de urgencia al hospital local, donde finalmente falleció.
La carta que anunció la tragedia
El contenido del mensaje reveló la intención del hombre de responsabilizar a la madre por lo ocurrido. El escrito comenzaba así:
“Jamás vas a poder olvidar a Fran y a mí, aunque no (te) guste eso, y por culpa tuya nos fuimos para siempre. Por ser una (…) que él no merecía y muy mala mujer”.
Amenazas, reproches y manipulación emocional
En otro fragmento, Suárez continuaba:
“Daiana, nos vamos con Fran así estás tranquila como lo decidiste, te propusimos que no te vayas a Pigüé y lo hiciste igual, no te importó el amor de tu hijo, así que ahora hacete cargo de tus actos. Me volviste a mentir en la cara, te burlaste de mi otra vez y no te lo voy a permitir”.
Luego agregó:
“Ahora a llorar a la iglesia Daiana García. Me voy con mi bebé Francisco porque le prometí cuidarlo siempre y así lo haré. Él va a estar bien junto a mí dónde quiera que estemos”.
El texto siguió con ataques hacia la madre del niño:
“A vos el nene no te importa y nunca te importó. Ahora seguí con tu vida como vos decís, con tus 34 años, pero veamos qué tan feliz sos cuando veas un nene como Fran con su mamá”.
Finalmente, cerró con una frase que revela la intencionalidad de daño emocional:
“Te lo dije Daiana, el que ríe último, ríe mejor y no me diste bola y seguiste burlándote, eso lo tenés que pagar. Yo a Fran lo voy a seguir cuidando siempre conmigo. En cambio, vos no lo vas a volver a ver nunca más, vos te lo perdiste”.
Un crimen que reabre debate sobre denuncias previas y protección
La tragedia ha vuelto a poner sobre la mesa el debate respecto a las alertas tempranas, las denuncias por violencia y las medidas judiciales que muchas veces no logran anticipar situaciones de alto riesgo. Autoridades y especialistas han insistido en reforzar los protocolos de evaluación y respuesta.