La región de Los Lagos enfrenta una situación crítica debido a la proliferación de incendios forestales, con especial atención en el sector Chin Chin Viejo de Puerto Montt, donde la superficie afectada ha visto un incremento significativo. Este escenario de emergencia se extiende también a las comunas de Fresia, Palena y al Archipiélago de Chiloé, poniendo en alerta máxima a las autoridades y a los equipos de emergencia.
Expansión del Fuego en Los Lagos
El incendio en Chin Chin Viejo, que se encuentra bajo combate activo, ha devastado hasta el momento 288 hectáreas, siendo parte de un conjunto de siniestros que mantienen a Puerto Montt en Alerta Roja. Otros focos incluyen áreas en el camino a San Antonio con 711 hectáreas, Alerce con 42 hectáreas, Senda Sur con 5 hectáreas, y Camino a Lagunitas, donde se han consumido 0,3 hectáreas.
Además, en la comuna de Fresia, se combate un incendio en el sector de Río Blanco. Mientras tanto, en el Archipiélago de Chiloé, un incendio en Quinchao ha afectado 0,3 hectáreas y otro en la comuna de Palena, específicamente en el sector El Tranquilo, se mantiene controlado en 0,5 hectáreas.
Esfuerzos de Contención y Llamados a la Comunidad
Alejandro Verges, director Regional de Senapred, ha informado sobre las acciones y estrategias que se están implementando para combatir esta emergencia. Se ha hecho un llamado a la comunidad para respetar las condiciones del tránsito y tomar precauciones, especialmente en áreas donde el humo reduce la visibilidad, como destacó el prefecto de Carabineros, Eduardo Rosales.
La respuesta a estos incendios ha requerido una concentración de esfuerzos, especialmente en el trabajo aéreo, que se ha focalizado en las comunas de Puerto Montt y Fresia, buscando controlar y reducir la expansión de las llamas.
Repercusiones y Medidas a Tomar
Esta serie de incendios forestales no solo ha causado una destrucción significativa del entorno natural y pérdida de biodiversidad, sino que también ha generado una alerta sobre la necesidad de fortalecer las medidas de prevención y respuesta frente a este tipo de desastres. La comunidad local, junto con las autoridades, se encuentra en una constante vigilancia y colaboración para mitigar los efectos de estos siniestros.
La situación en Los Lagos es un recordatorio crítico de los desafíos que enfrenta Chile en el manejo de emergencias naturales, especialmente durante los meses de verano cuando las condiciones son propicias para la propagación de incendios. La cooperación ciudadana, junto con el trabajo incansable de los equipos de emergencia, es fundamental para superar esta crisis y prevenir futuros desastres.
