Niños, niñas y adolescentes han denunciado los últimos días abusos sexuales y torturas por porte de educadores, al interior del Centro Residencial Santa Mónica de Ancud.
Detectives de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme) de la Policía de Investigaciones de Ancud se encuentran realizando investigaciones en el lugar.
Los relatos de estos niños no solo comentan abusos sexuales, sino graves agresiones físicas y psicológicas en donde mencionan al “tío” y a una “tía”, además de propuestas con incitación a la prostitución a dos trabajadoras de vulnerabilidad social.
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El inicio de la investigación:
Todo comenzó cuando una menor de 15 años, oriunda de Quellón, acusó a su educador quien constantemente le hacía tocamientos de índole sexual, además de pedirle a la joven que no revelara lo sucedido, pues cerrarían el recito y serían enviados fuera de Chiloé.
Tras la amenaza, la victima decidió callar, aunque si conto lo sucedido a otras compañeras, quienes al enterarse, enfrentaron al educador para que no continuaran los actos abusivos.
Una pelea se originó entre la víctima y el imputado, luego de adoptar la medida de defesa y él acuso a la joven a la dirección del recinto, ente el cual optó por apoyar al presunto pederasta y trasladar al joven hacia otro hogar en Osorno.
Sin embargo este traslado solo envalentonó a la menor a denunciar. Al ser el recinto dependiente de la Sociedad de Asistencia y Capacitación (ex Sociedad Protectora de la Infancia), que es colaborador del Servicio Nacional de Menores (Sename) de Los Lagos, desde este organismo se decidió iniciar una supervisión técnica de urgencia durante esta semana.
Las indagaciones fueron rápidas, en las que conocieron más víctimas y relatos espantosos de varios niños y adolescentes, con rangos de edad que van desde los 7 años hasta los 17 años.
Una de las niñas, oriunda de Ancud, de 14 años de edad, relató que el mismo “tío” intentó tocarle a la fuerza sus genitales y senos, tras defenderse logro escapar.
Por otro lado, se reveló también que un menor de 14 años de edad oriundo de Paillaco fue golpeado por el mismo delincuente, aparentemente por querer defender a otra potencial víctima. El niño quedó con una severa lesión en el rostro sin que alguna alarma se haya activado al interior del Centro Residencial Santa Mónica, no existiendo (aparentemente) algún registro de atención médica, no descartándose que exista una clara intención de ocultar malos tratos.
En particular, las declaraciones de varios niños y niñas se repiten. Además de referir que al menos cuatro eran víctimas de tocamientos indecorosas, se mencionan gritos, peleas, que los «tíos» ahorcaban a algunos pequeños o tratos degradantes.
Incluso, se indica que una «tía» agredió con un tenedor a un niño de 7 años de edad oriundo de Nueva Imperial, quien había llegado al recinto para supuestamente alejarlo de horrendas vejaciones en su lugar de origen, pero se encontró con esta mujer que además de maltratarlo psicológicamente, lo golpeaba y le gritaba apelativos denigrantes.
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Por si todo no fuera suficiente, a lo anterior se sumarían dos denuncias respecto del mismo «tío» objeto de los aparentes ultrajes sexuales con menores. Existirían antecedentes razonables que acreditarían que este sujeto les habría ofrecido dinero a dos trabajadoras de alta vulnerabilidad social a cambio de mantener relaciones sexuales.
Lo anteriormente relatado fue conocido por organismos del Estado hasta el pasado miércoles 28 de octubre, el Sename decidió llevar a cargo una serie de acciones, como visitar el lugar para realizar entrevistas a los niños y posteriormente poner la denuncia al Ministerio Público.
En el Juzgado de Garantía de Ancud fueron interpuestos dos querellas criminales a través de la Dirección Regional del Sename respecto a los dos trabajadores mencionados y todos aquellos que resulten responsables en calidad de autores, cómplices o encubridores.
Información de La Opinión de Chiloé
