Raimundo e Iván protagonizan un tenso enfrentamiento en Los Casablanca, tras descubrir que Jonás fue sorprendido consumiendo drogas.
La teleserie nocturna de Mega, Los Casablanca, sigue subiendo la temperatura. En su episodio 130, dos de sus protagonistas más intensos, Iván (interpretado por Pancho Melo) y Raimundo (Pancho Reyes), volverán a verse las caras en un enfrentamiento que promete ser de alto voltaje emocional.
Jonás desata la furia de su padre
Todo parte cuando Ángel (Rodrigo Soto) le revela a Raimundo que sorprendió a Jonás (Max Salgado) consumiendo cocaína durante su turno en la posta rural. La noticia cae como un balde de agua fría, y el patriarca de los Casablanca no tarda en reaccionar.
Furioso, Raimundo va directo a encarar a Iván. “¡Iván, abre mierd… ¡Mi hijo jalanado, imbécil!”, grita desesperado desde el exterior de la casa del empresario hotelero, en una escena cargada de tensión.
El cruce de reproches entre hermanos
Iván, desconcertado, le pregunta qué está ocurriendo. “¿De qué estás hablando?”, responde sin entender del todo la situación. Pero Raimundo no tarda en aclararle que su hijo ha estado consumiendo drogas: “Ah, ¿no sabes que mi hijo está consumiendo cocaína?”.
La discusión se transforma rápidamente en una guerra de recriminaciones. Iván reacciona furioso: “Pendejo de mier…”, a lo que Raimundo no duda en devolverle el golpe: “No, pendejo tú… ¿Para eso querías quitarme a mi hijo?”.
Intentando defenderse, Iván lanza su postura: “A ver, Raimundo, yo no te he quitado a ningún hijo. Porque Jonás siempre ha sido mi hijo”. Pero su hermano no se lo deja pasar: “¿Siempre has sido su padre? ¿Lo viste caminar, cambiar sus dientes?… ¿Tú estabas ahí? Papito corazón”.
El intercambio va subiendo de tono hasta que Iván insiste: “Puedes decir lo que quieras. Pero yo voy a seguir siendo el papá de Jonás”. La respuesta final de Raimundo es tan punzante como lapidaria: “Bueno, si quieres ser papá, hazte responsable. Yo crié a un hijo sano y no un drogadicto, imbécil”.
Iván enfrenta a su hijo
Tras ese crudo enfrentamiento, Iván decide buscar a Jonás en la posta para enfrentar directamente la situación. Sin embargo, lo que espera que sea una conversación aclaratoria, pronto se transforma en otro duro cruce que deja en evidencia las fracturas emocionales entre padre e hijo.
Los Casablanca sigue atrapando a sus seguidores con una historia intensa y llena de conflictos familiares que no dan tregua. ¿Podrán estos personajes encontrar algún punto de reconciliación? El drama está lejos de terminar.