Elisa Martínez, abuela del pequeño Tomas Bravo, sostuvo una reunión con la fiscal encargada del caso, Marcela Cartagena, para abordar diligencias investigativas.
Tras el encuentro, declaró a los medios y señaló que: “Hay involucrados terceros, eso está claro, por eso ahora hay que buscar quiénes son los culpables y enfocarse no sólo en una persona”.
Asimismo, la abuela del menor indicó que “aquí lamentablemente son todos sospechosos”.
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Concluyó diciendo que el Ministerio Público se encuentra investigando la intervención de terceras personas.
Por su parte, Alejando Espinoza, abogado querellante, indicó que la familia ha manifestado a la Fiscalía sobre ciertas diligenciaras que se desarrollaron con la Policía.
Tras ello, refirió que “se están tomando, a nuestro juicio, las medidas correctivas necesarias”.
El cuerpo de Tomás Bravo se encontró nueve días después de su desaparición ocurrida el miércoles 17 de febrero a eso de las 19:30 hrs. En un hecho ocurrido en el sector de rural de Caripilun, ruta ubicada entre Lebu Arauco, en la región del Biobío.
Sus restos permanecen en el Servicio Médico Legal (SML) de Concepción a la espera de pericias nacionales e internacionales que puedan esclarecer la causa de muerte.
