El pasado viernes, tres trabajadores de Parque Safari de Rancagua fueron atacados por un tigre mientras realizaban labores de aseo y limpieza, pero lo peor del suceso lo vivió Catalina Torres Ibarra de 21 años, quien recibió el mortal ataque del felino, falleciendo inmediatamente.
Desde el parque detallaron que los trabajadores solo debían barrer la gravilla para evitar que se dificultara el cierre de los animales.
El gerente de Administración y Finanzas, Antonio Rojas, recalcó que “todos los animales estaban en sus recintos encerrados con llave”.
Sin embargo, esta declaración fue desmentida por trabajadores del recinto que acusaron negligencia, ya que el tigre estaba suelto y nadie les avisó. Esto también lo confirmó la madre de la víctima, Sara Ibarra, quien relató cómo fue el episodio que le quitó la vida a su hija, expuso En la hora.
Declaraciones
“Ella trabajaba como guía del parque. Pero este viernes a ella y otros tres trabajadores los mandaron a limpiar esa jaula, sin advertirles que estaba suelto el tigre. Cuando sus compañeros ingresaron, no pudieron hacer nada”, aseguró la madre, quien añadió que entre los heridos se encontraba el novio de su hija, pero este no pudo hacer nada para rescatarla.
Mi hija era un ser de luz, alegre, simpática y amaba a los animales. Tenía muchos amigos y era muy querida. Hacía un montón de cosas: arte circense, patinaba, hacía tela, piruetas y era monitora de esas disciplinas. Su sueño era viajar por muchos países.
Se espera que continúen las pericias en el recinto, además de dilucidar que pasará con el tigre tras darle muerte a una trabajadora del Parque Safari.
