El día de la votación en Sala, el Senado ratificará o rechazará el resultado de la comisión de Constitución, instancia que aprobó la idea de legislar el cuarto retiro.
Si la medida es aprobada, entonces el proyecto vuelve a la comisión para que sean discutidas las eventuales indicaciones que ingresen los parlamentarios. Por el contrario, si es rechazada, se crea una comisión mixta (compuesta por diputados y senadores) que reformulará la iniciativa.
Ambos procesos pueden tardar semanas en concretarse, considerando la cargada agenda legislativa que tendrá el Congreso durante noviembre y diciembre.
Si el cuarto retiro es aprobado…
Cuando estén las indicaciones, la comisión de Constitución las analizará y efectuará la votación en particular del cuarto retiro, para despacharlo nuevamente a la Sala del Senado.
En esta instancia se define el futuro del proyecto, dado que si los senadores lo aprueban, será despachado en condiciones de convertirse en ley. De esta manera, el Presidente Sebastián Piñera lo promulgaría para su posterior publicación en el Diario Oficial y así entraría en vigencia.
No se descarta que el Gobierno recurra al Tribunal Constitucional para evitar la materialización del proyecto, tal como lo hizo en la segunda y tercera extracción de fondos de las AFP.
Si el cuarto retiro es rechazado…
En la comisión mixta (tras ser eventualmente rechazado en la Sala del Senado), los congresistas tendrán que reformular el proyecto de ley y nuevamente someterlo a votación. Si no hay acuerdo, el cuarto retiro podría quedar totalmente desechado.
Pero si hay acuerdo, la iniciativa vuelve a la Cámara de Diputados (por ser la cámara de origen) y también tendrá que votarlo. Si aprueba el proyecto de la comisión mixta, avanza al Senado; pero si lo rechaza, tampoco habrá ley.
Si llegase a ser aprobado por el Senado en esta segunda oportunidad, entonces queda en condiciones de convertirse en ley, siempre que el Presidente estampe su firma de promulgación.
¿Cuántos votos necesita para ser aprobado?
Una vez que la comisión realiza la votación en particular, despacha el cuarto retiro a la Sala del Senado. Junto con ello, también envía un informe -no vinculante- de la aprobación o rechazo de las indicaciones, para que sean consideradas por la totalidad de los senadores.
De esa manera, ya en el Senado, el cuarto retiro necesita 26 votos para su aprobación, y la oposición tendría 23 de esos votos, pues en los últimos días algunos parlamentarios se han desligado del proyecto. De este modo, se requeriría del apoyo de tres senadores oficialistas.
Por ejemplo, la senadora Carolina Goic (DC) reiteró que no votará a favor de una nueva extracción de los fondos. Su par Carlos Montes (PS) también manifestó que “me es muy difícil votar a favor, y eso lo he dicho una y otra vez por todo lo que implica”.
En la misma situación estaría Jorge Pizarro (DC), quien declaró que “no cabe duda que el proyecto que llega es un mal proyecto, y eso hace difícil votarlo tal como está”.
