Un sujeto fue detenido por Carabineros luego que su expareja llamara al 133 simulando hacer un pedido de sushi, tras haber sido aparentemente agredida sexualmente.
Entre lágrimas se le escucha decir “quiero sushi… tengo hambre” en repetidas ocasiones al llamar a la Central de Comunicaciones (Cenco) de Carabineros.
El mensaje fue entendido por una funcionaria policial, quien comenzó a solicitarle sus datos personales, como su nombre y dirección, a lo que la mujer contesta con una voz que demuestra la situación que estaba viviendo.
Al teléfono, se le escucha decir a la víctima: “Yo igual me equivoqué… hice muchas cosas malas”, aparentemente hablando con su agresor.
“Ya no importa”, dice la joven de 20 años antes de cortar la comunicación y esperar la llegada de los efectivos policiales hasta el lugar.
Simularon ser repartidores
El hecho ocurrió la tarde de este domingo en la comuna de Santiago, publica Meganoticias.
El mayor Gorka Verde, de la 2° Comisaría, oficiales de la SIP dijo que “para poder lograr la detención de este sujeto, simulan ser repartidores de comida. Vale decir, siguen el juego de la persona que estaba solicitando el auxilio de Carabineros”.
Ambos habrían mantenido una relación que terminó hace cuatro meses.
