Según el primer informe de la Comisión Ciudadana de Vigilancia, que será presentado este viernes ante el Gobierno, la Ley “Ricarte soto” no será “sostenible” y pide evaluar las coberturas.
Si la ley “continúa funcionando con las mismas condiciones actuales, no sería sostenible en el tiempo, por lo que esta problemática requiere ser abordada de forma prioritaria y con urgencia”, se detalla en el informe.
En tanto, el académico de la Facultad de Medicina de la Universidad del Desarrollo y miembro de la comisión, Pablo Vidal, indicó que “se hizo una proyección de los ingresos y gastos, y con las prestaciones que ya están comprometidas, al año 2027 no habría ninguna holgura, y en 2028 tendríamos más gastos que ingresos. Pero además se proyecta que haya un aumento de beneficiarios, en la medida que pase el tiempo, y también debiera haber un aumento de las prestaciones”.
Por su parte, la directora de la Fundación Chilena de Enfermedades Lisosomales y también integrante de la instancia, Myriam Estivill, sostuvo que “además de estar atrasados más de un año con el quinto decreto, el cual permite el ingreso de nuevas tecnologías y tratamientos, estamos muy preocupados por los recursos existentes, lo que hace que nos preguntemos, sin la Ley ‘Ricarte Soto’, qué sucederá con los pacientes que padecen enfermedades poco frecuentes”.
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Solicitan evaluar el traspaso de prestaciones
Del mismo modo, se solicitó evaluar el traspaso de prestaciones que actualmente son financiadas al Régimen General de Garantías de Salud, se acota en Cooperativa.cl donde también se menciona la eliminación de ciertas coberturas de esta legislación, para pasarlas así al Plan Auge.
“Nos dimos cuenta de que el financiamiento no iba a ser suficiente y se sugieren algunas soluciones, tal vez lo más fácil de sugerir es que se aumente el financiamiento. Pero también que, una vez que algunos tratamientos estén consolidados, se traspasen a las Garantías Explíticas de Salud (GES)”, puntualizó Vidal.
Igualmente, se solicitó revisar la definición de tipos de diagnósticos y tratamientos incluidos actualmente, para asegurar que estén alineados con el espíritu de la ley.
En cuanto a la tercera modificación, esta busca ajustar el mecanismo de financiamiento considerando un presupuesto creciente en el tiempo. “Lo que estamos observando es que en todo el mundo, con la aparición de nuevas tecnologías de tratamientos y nuevos productos, se está haciendo muy difícil financiarlos. Estamos constatando un problema de los costos que tiene la incorporación de nuevas tecnologías para la mayoría de los sistemas de salud”, indicó Vidal.
