Presunto asesino de Ana María Pizarro ya habría matado a otra mujer: surge macabro antecedente

Expareja de Ana María Pizarro, quien está prófugo, sería también el principal sospechoso de otro brutal crimen ocurrido en 2019.

Ana María Pizarro

Nuevos y estremecedores antecedentes surgieron en torno al caso de Ana María Pizarro, la mujer de 56 años que permaneció desaparecida por más de dos semanas y cuyo cuerpo fue hallado desmembrado en la ciudad de La Serena.

Ana María fue vista por última vez el pasado 3 de abril, cuando salió de su hogar con destino a cobrar un finiquito. Su rastro se perdió hasta el 19 de abril, día en que la policía encontró sus restos en las inmediaciones de Avenida Cuatro Esquinas. La identificación del cadáver fue posible solo tras un análisis genético.

Ministerio Público identifica al principal sospechoso

La Fiscalía confirmó que ya existe un presunto autor del crimen: se trataría de una expareja de la víctima, quien actualmente se encuentra prófugo de la justicia. Las autoridades han intensificado su búsqueda, ya que nuevos datos indican que Ana María no sería su única víctima.

Posible vínculo con otro homicidio sin resolver

De acuerdo con información de T13, el hombre en cuestión también estaría relacionado con el asesinato de María José Zambra, una mujer de 35 años cuyo cuerpo desmembrado fue hallado bajo un puente en La Serena el 18 de octubre de 2019. Hasta la fecha, ese caso no cuenta con un responsable formal.

Una conexión a través de un celular

Un elemento clave en la nueva línea investigativa sería un teléfono celular. Según detalló la investigación, semanas después del hallazgo de María José, su teléfono —que estaba desaparecido— fue reactivado. Al indagar, las autoridades descubrieron que el chip del equipo estaba insertado en el celular de Ana María Pizarro.

Cuando fue consultada, Ana María aclaró que era su equipo, pero también señaló que “no era ella quien lo usaba: estaba en poder de su pareja, el mismo sujeto que hoy es intensamente buscado”.

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La PDI continúa tras los pasos del sospechoso, cuyo paradero es desconocido, y no se descarta que existan más víctimas vinculadas a su historial criminal.