Te pueden multar con $103 mil: El elemento de seguridad que muchos olvidan al conducir
No usar un elemento básico de seguridad al conducir podría significar una costosa infracción según la normativa vigente.

En el marco de las normas de tránsito, respetar las disposiciones establecidas no solo protege a quienes circulan en vehículos, sino que también evita costosas sanciones. Una de las prácticas más ignoradas —aunque fundamentales— es el uso correcto del cinturón de seguridad.
Este simple pero crucial gesto puede marcar la diferencia en caso de accidente, y su incumplimiento conlleva una fuerte multa que supera los $100.000 pesos.
¿Qué arriesgas si no usas cinturón?
Todo conductor y pasajero que no utilice el cinturón de seguridad se expone a recibir una infracción considerada grave, sancionada con una multa de hasta 1,5 UTM. De acuerdo al valor actual (junio de 2025), esto equivale a aproximadamente $103.000. La fiscalización por parte de Carabineros es frecuente y rigurosa, especialmente en zonas urbanas y carreteras.
No es solo para autos particulares: buses y taxis también cuentan
El uso obligatorio del cinturón de seguridad no se limita únicamente a vehículos particulares. En el caso de los buses interurbanos fabricados desde el año 2008 en adelante, todos los asientos deben contar con este sistema de seguridad. Por tanto, su utilización es exigida tanto por el conductor como por los pasajeros durante todo el trayecto.
Asimismo, quienes utilicen servicios de taxis o vehículos que operan bajo plataformas de transporte también deben cumplir con esta normativa. En estos casos, si el pasajero no lo utiliza, la multa recaerá directamente sobre él.
Seguridad y prevención: responsabilidad compartida
El cinturón de seguridad no solo es una exigencia legal, sino también una herramienta básica para reducir el riesgo de lesiones graves o fatales en caso de accidente. Las autoridades han reforzado la campaña educativa para que tanto conductores como usuarios comprendan la importancia de cumplir esta medida de forma constante.
Recordar este pequeño pero vital paso antes de poner en marcha el vehículo podría evitar no solo un accidente, sino también una costosa multa.