La madre de Tomás Bravo agradece el apoyo y las emotivas muestras de cariño en el memorial de su hijo en Arauco.
Han pasado más de cuatro años desde la trágica muerte de Tomás Bravo, el pequeño de tres años cuyo caso conmocionó a Chile. Aún así, su madre, Estefanía Gutiérrez, no deja de sorprenderse por el inmenso cariño que la gente sigue demostrando en el memorial ubicado en Arauco, región del Biobío.
Un cuaderno que guarda mensajes de todo Chile
A través de sus redes sociales, Estefanía compartió un sentido video mostrando cómo el lugar se ha llenado de dedicatorias, juguetes, flores y velas. “Nosotros empezamos dejando un cuaderno y un lápiz. Nunca creímos que la gente le iba a escribir tanto a mi hijo. De hecho, ese es un cuaderno nuevo que le dejaron a mi hijo acá. Es increíble cómo la gente le escribe”, relató emocionada.
El memorial no solo es un espacio físico, sino también un símbolo de lucha por la justicia. Las personas dejan allí no solo regalos, sino también dibujos, cartas y palabras de apoyo para la familia.
El amor que traspasa la distancia
En su relato, Estefanía destacó la conmovedora participación de desconocidos que, aunque no pueden acudir al lugar, envían mensajes desde distintas partes del país. “La gente le deja dedicatorias. También dejamos un buzón para que dejaran guardadas sus cartitas, dibujos, buenos deseos, tanto para nosotros como para su justicia. Le dedican mensajes muy bonitos, le cuentan sus cosas y he leído cosas muy bonitas de gente que viene de todos lados del país”, contó.
La madre agradeció profundamente: “Por todo el amor que le dan a mi hijo, porque no se olvidan de él, lo vienen a ver constantemente”, y resaltó que ese apoyo no solo está presente en el memorial: “Pese a que hay mucha gente que no lo puede venir a ver al memorial, siempre están escribiendo algo bonito y nos acompañan a la distancia, entregando su cariño”.
Justicia que aún se espera
Finalmente, Estefanía expresó su gratitud a quienes mantienen viva la memoria de Tomás: “Siguen pidiendo verdad y justicia, pese a que han pasado cuatro años. No se olvidan de mi hijo y lo siguen manteniendo vivo en su corazón”, afirmó.
El caso de Tomás Bravo sigue siendo un llamado abierto a que se esclarezcan los hechos y se haga justicia, mientras su madre encuentra consuelo en el amor de tantas personas que no lo han olvidado.
