El potente mensaje que Gabriel Boric le envió a su hija Violeta tras discurso en el Día de las Víctimas de Desaparición Forzada

El Presidente Gabriel Boric reflexionó sobre la memoria histórica y la defensa de los derechos humanos, con un emotivo mensaje para su hija Violeta

El Presidente Gabriel Boric dio un importante discurso en el Palacio de La Moneda con motivo del Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada. En esta fecha tan significativa, Boric estuvo acompañado por su pareja, Paula Carrasco, y su hija Violeta, nacida recientemente a finales de junio. El evento se convirtió en un momento lleno de emoción, reflexión y compromiso con la memoria histórica.

Crítica al negacionismo

Durante su intervención, Boric no dudó en expresar su rechazo a las voces que intentan minimizar los horrores cometidos durante la dictadura de Augusto Pinochet. “El negacionismo que hay el día de hoy en el Congreso de parte de sectores políticos que niegan la importancia de esta memoria, es brutal”, afirmó el mandatario.

Estas palabras estuvieron dirigidas a aquellos que, en su opinión, intentan silenciar o distorsionar el dolor de las víctimas de la dictadura. Boric reiteró que, pese a los intentos de olvido, “no vamos a olvidar y también tratar de convencerlos que este dolor es genuino”. El Presidente remarcó que este dolor no es motivo de división, sino una muestra de amor profundo por las víctimas y sus familias: “Pensar en los familiares y en quienes partieron, no es dividir, es amor. Es un amor que no se apaga. No los vamos a olvidar”.

Un mensaje para las futuras generaciones

Con la presencia de su hija Violeta, Boric aprovechó la ocasión para enviar un mensaje a las nuevas generaciones. Reafirmó el compromiso con la democracia y los derechos humanos, destacando que la búsqueda de justicia por las víctimas de la dictadura es una causa que seguirá viva en la memoria colectiva de Chile.

“Reiteramos con más fuerza que nunca que nadie está olvidado. Le decimos a nuestros compatriotas y las generaciones que vendrán, que defenderemos la democracia y los Derechos Humanos siempre.” Además, el Presidente hizo una emotiva mención a su hija Violeta, quien, en ese momento, se encontraba en brazos de su madre: “Si escucharon recién el sonido hermoso de una guagüita de 2 meses, es Violeta que está ahí con mi compañera y quiero decirle… Gracias Paula por venir”.

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Un cierre lleno de emoción

Al final de su discurso, Boric dedicó unas palabras a su hija, mirando al futuro con esperanza: “Quiero decirle a Violeta, quien seguramente lo va a escuchar en unos años más, que esta búsqueda también es por ella. Esas generaciones también tienen que saber lo que pasó, y las generaciones que vienen, no me cabe ninguna duda, que van a continuar con ese espíritu de lucha para que no nos olvidemos de hacer un país y un mundo más justo para todos y todas”.

Tras finalizar su mensaje, el Presidente se acercó a Paula Carrasco para besarla, mientras ella sostenía a la pequeña Violeta, marcando un cierre emotivo y lleno de simbolismo de este acto conmemorativo.