Nuevas imágenes reactivan el caso de María Elcira y abren dudas sobre testimonios no tomados en el restaurante de Limache.
A más de un año de la desaparición de María Elcira Contreras en Limache, un conjunto de registros audiovisuales volvió a instalar interrogantes sobre lo que realmente ocurrió aquel Día de la Madre de 2024. La aparición de estos videos genera presión para esclarecer la participación de personas que, según la familia, nunca fueron consideradas en las primeras diligencias.
El día en que la adulta mayor desapareció sin dejar rastro
María Elcira había llegado al restaurante del fundo Las Tórtolas junto a su familia para celebrar la jornada. Minutos después de pedir permiso para ir al baño, tomó un camino que la desvió hacia el sector de los estacionamientos. Desde entonces, no se supo más de ella y comenzó una búsqueda que no ha cesado.
Surgen videos que podrían ser claves para la investigación
Durante las últimas horas salieron a la luz imágenes fechadas el 12 de mayo de 2024, en las que aparece un hombre que la familia identifica como un testigo relevante. Se trataría de un garzón del restaurante, quien llegó en un vehículo particular y que incluso estuvo muy cerca del grupo familiar aquel día.
Un testimonio que no se tomó
De acuerdo con Nadia Mancilla, perito en análisis de video y exintegrante del Laboratorio de Criminalística de la PDI, en el expediente del caso habría inconsistencias en el registro de personal del recinto. La especialista detalló que “en la carpeta está el listado del personal (del restaurante) y solo aparecen meseras mujeres, tres o cuatro mujeres”.
Según Mancilla, en ese mismo documento se menciona que había hombres trabajando, pero que no se consideraron sus relatos. “Se mencionan a cuatro varones y dice en la carpeta, y lo dice como testimonio: ‘No se les toma la declaración, solo se les empadronarán por cuanto ellos siempre estuvieron en la cocina‘“, explicó.
Sin embargo, los videos muestran otra realidad: el garzón caminaba entre las mesas, salía del restaurante para hablar por teléfono y se veía nervioso, lo que genera dudas sobre por qué nunca fue interrogado formalmente.
La indignación de la familia ante las nuevas revelaciones
Carla Hernández, nieta de María Elcira, reaccionó con molestia al enterarse de que no se tomó declaración al trabajador que aparece en los registros. “Me parece increíble que no se le haya tomado declaración a esta persona sabiendo lo importante que era, todas las personas que estuvieron ahí en el restaurante. No sólo se debió tomar la declaración a los meseros, también a los que estaban en la cocina”, dijo.
Sospechas por la falta de diligencias
La joven aseguró que este tipo de omisiones ha deteriorado la confianza de la familia en la investigación. “No quisieron investigar, no quisieron ir más allá, ahora dudamos absolutamente de todo. Puede que el testimonio podría haber sido muy importante y no quisieron tomarlo en cuenta”, afirmó.
Para Carla, los antecedentes hacen pensar en algo más grave. “A veces creo que fue a propósito, empiezo a pensar mal, son tantas cosas que siento que no quisieron llegar a la verdad. Llevaron a la investigación para cualquier lado”, sentenció.