Un método silencioso y casi invisible está generando alarma en malls del país. Usuarios revelan cómo operan y por qué nadie se da cuenta
Durante los últimos meses, un inquietante relato comenzó a repetirse en redes sociales: delincuentes estarían utilizando un inesperado método para robar en los baños de centros comerciales en Chile, aprovechándose de descuidos mínimos y del propio diseño de estos espacios.
Aunque para muchos suena como algo nuevo, varios usuarios aseguran que esta técnica lleva años siendo utilizada, pero recién ahora se ha vuelto viral gracias a testimonios que acumulan miles de reproducciones y comentarios.
El relato que encendió las alertas en redes sociales
Uno de los registros más comentados fue el de un joven que relató con evidente molestia cómo fue víctima del robo. “Tengo rabia ni siquiera por lo que me robaron, sino por cómo me robaron”, señaló en el video. Luego agregó, sorprendido: “Yo no tenía idea, nunca se me hubiera ocurrido”.
Su testimonio abrió un debate inmediato, donde otras personas comenzaron a contar experiencias similares o advertencias tras haber estado a punto de pasar por lo mismo.
Así funciona el método que preocupa a los usuarios
Según explican quienes han analizado esta modalidad, los delincuentes se aprovechan de un momento muy específico: cuando una persona entra al baño, ocupa un cubículo y deja sus pertenencias —como mochilas, bolsos o chaquetas— colgadas o apoyadas detrás del WC.
Desde el cubículo contiguo, el antisocial estira los brazos por sobre el separador y sustrae los objetos sin hacer ruido. La víctima no lo nota de inmediato, ya que está sentada y mirando hacia la puerta, sin visibilidad hacia la parte trasera.
“Se notaba que era un modus operandi”
Otra persona que logró evitar el robo contó que alcanzó a reaccionar a tiempo. “Se notaba que este era un modus operandi que tenían estas personas”, afirmó, reforzando la idea de que no se trata de hechos aislados.
En los comentarios, el tono fue desde la incredulidad hasta la indignación. “Pero, ¿cómo no se va a poder cagar tranquilo?”, escribió un usuario, reflejando el sentir de muchos.
El llamado a no confiarse en espacios públicos
Frente a esta situación, varios internautas comenzaron a compartir consejos para evitar ser víctimas. “Ya pasa en todos los malls de diferentes comunas, por eso tienen que entrar al baño con las cosas a su vista, no descuidarlas o creer que están en un lugar seguro, porque no lo son”, advirtió otra persona.
El mensaje se repite: aunque parezca un espacio privado y seguro, los baños de centros comerciales también pueden convertirse en un punto vulnerable. Mantener las pertenencias siempre a la vista y no dejarlas fuera del alcance visual podría marcar la diferencia.

