Francisco Kaminski enfrenta una difícil etapa marcada por deudas, investigaciones judiciales y problemas familiares que agravan su situación.
El animador Francisco Kaminski atraviesa uno de los momentos más complejos de su vida personal y profesional. Su nombre ha quedado vinculado a una investigación por el homicidio del conocido “Rey de Meiggs“, y además, se le atribuyen deudas millonarias relacionadas con antiguos negocios. A esto se suma el delicado estado de salud de su padre, situación que agrava aún más su escenario familiar.
Caso Meiggs: la conexión que lo llevó a declarar ante Fiscalía
Todo comenzó cuando se dio a conocer el asesinato del prestamista conocido como el “Rey de Meiggs”, crimen que habría sido ejecutado por sicarios, presuntamente contratados por Wilson Verdugo, amigo cercano del animador.
La relación entre Kaminski y la víctima no era menor: ambos mantenían una estrecha cercanía, y el animador incluso le debía una suma de dinero, compromiso que, según se supo, asumió pagar a la viuda del fallecido. Por este motivo, fue citado a declarar por el Ministerio Público, con el objetivo de esclarecer su vínculo con el caso.
Su padre sufrió un infarto tras conocer los hechos
A los problemas judiciales se sumó una lamentable situación personal. El padre de Kaminski sufrió un infarto, hecho que habría ocurrido poco después de que se conocieran públicamente los antecedentes que involucraban a su hijo en el caso Meiggs.
El complejo estado de salud de su padre ha golpeado emocionalmente al animador, quien también estaría atravesando una ruptura con su pareja, Camila Andrade, según comentaron en el programa Hay que Decirlo, de Canal 13.
Deuda de $50 millones: la denuncia de un vecino de Willy Sabor
En el mismo programa televisivo, el humorista Willy Sabor reveló una situación que involucra a un vecino suyo, un empresario de origen alemán, quien le habría vendido máquinas industriales a Kaminski para montar una fábrica de cecinas.
Sin embargo, el negocio terminó mal. Según relató el comediante, el empresario lo contactó por teléfono buscando ayuda, ya que Kaminski mantenía una deuda pendiente de $50 millones relacionada con la compra de estas máquinas.
“Le compró las máquinas a mi vecino, me llamó por teléfono preguntando por Kaminski, por una deuda de 50 millones de pesos. Hace como cuatro años atrás”, relató Willy Sabor. Finalmente, aclaró: “Le dije que no sabía cómo ayudarlo, que no es mi tema”.
Una situación que sigue escalando
Con deudas impagas, una investigación judicial en curso y problemas familiares graves, Francisco Kaminski enfrenta una tormenta mediática que ha puesto en jaque su estabilidad. Por ahora, no ha emitido declaraciones públicas respecto a las acusaciones, aunque su nombre sigue generando controversia tanto en medios como en redes sociales.