La noche del sábado, Carolina Arregui conmovió a sus seguidores al compartir en redes sociales una fotografía junto a su fallecido esposo, el doctor Roy Sothers, quien habría cumplido 66 años ese día. El médico perdió la vida el pasado 5 de mayo debido a un cáncer.

Junto a la imagen, la actriz escribió un mensaje breve pero cargado de amor: “Un amor para siempre… feliz cumpleaños mi Roy”, publicación que recibió cientos de reacciones y más de 500 comentarios. Entre ellos destacaron los de sus hijas, Mayte Rodríguez, quien expresó “Los amo infinito”, y María Jesús Sothers, que comentó: “Los mejores papás de este mundo, feliz vida”.

Un papel asumido como promesa

Meses antes, en julio, Arregui había confesado en el programa Only Fama, mientras grababa la teleserie de Mega Aguas de oro, que su regreso a las pantallas estaba profundamente ligado a una promesa personal. “Es lo que me mantiene en pie. Es uno de mis grandes amores. Ha sido un gran regalo para mí tener la valentía y la fortaleza… Le doy gracias a Dios y al universo por haberme atrevido a cumplir con una promesa”, señaló visiblemente emocionada.

La difícil decisión de volver

En esa misma conversación, el periodista José Antonio Neme le preguntó si en algún momento dudó en aceptar el rol. La actriz no lo negó: “Por supuesto. Dije ‘no puedo’, era muy complicado meterme en esta vorágine. Me costó retomar, desconectarme y volver a conectarme”.

Según contó, la motivación vino de dos personas clave en su vida: “Fue una promesa que hice a mi marido, que ya no está, y a la Quenita (Rencoret). Los dos me presionaron y me dijeron ‘la tienes que hacer, pase lo que pase'”.

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Una filosofía para cada escena

Finalmente, Arregui reveló que decidió enfrentar este reto con una convicción muy clara: “Cuando llegó el minuto dije: ‘ya, voy a hacer cada escena como si fuera la última. Es algo que tú amas y que no puedes dejar de hacer’”.

 

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