En Los Casablanca, Miranda confiesa su secreto y desata la furia de Genoveva, quien la expulsa de la casona.
El capítulo 154 de la teleserie nocturna de Mega, Los Casablanca, traerá una de las escenas más intensas de la trama. Miranda (Sigrid Alegría), luego de sincerarse con Raimundo (Francisco Reyes), dará un nuevo paso que marcará un quiebre en la historia.
Miranda decide confesar a Genoveva
Tras su conversación con Raimundo, la secretaria regresará a la casona con la decisión de contarle toda la verdad a Genoveva (María Elena Duvauchelle), mujer que siempre le brindó apoyo incondicional. Sin embargo, lejos de hallar comprensión, su confesión terminará costándole caro.
Entre lágrimas, Miranda intentará explicar lo ocurrido: “Yo no sabía toda la verdad. Solo tenía la versión de Iván. ¡Genoveva, créeme por favor!”, dirá angustiada.
La dura respuesta de Genoveva
El personaje de María Elena Duvauchelle no le dará tregua y la enfrentará sin piedad. “Cómo le voy a creer si todo el tiempo usted ha estado mintiéndole en la cara. Y a nosotros también. Yo confiaba en usted”, le reprochará con firmeza.
Lejos de detenerse ahí, continuará recriminándole: “¿Qué clase de persona es usted? Sabiendo y conociendo la historia de don Raimundo. ¿Por qué no le dijo la verdad al principio?”.
Miranda, desesperada, intentará defenderse: “Porque no sabía. Yo estaba engañada por Iván cuando entré aquí”, insistirá, buscando que le crean.
Expulsión de la casona
Aunque Miranda aclara que su relación con Raimundo no formaba parte de ningún plan, Genoveva no estará dispuesta a perdonarla. “Yo renuncié cuando me di cuenta que me estaba enamorando, porque sentía que no tenía derecho a eso”, explicará la secretaria.
Sin embargo, la respuesta será aún más dura: “Claro que no tenía derecho. Porque usted supo lo que pasó con doña Carla. ¿Por qué no le dijo ahí entonces?”, le reprochará Genoveva, antes de sentenciar: “Así como la está odiando ahora. Yo no puedo entender porque usted es tan cruel. Usted no tiene perdón de dios. ¡Váyase!”.
Una despedida sin consuelo
En un último intento, Miranda pedirá quedarse para asegurarse de que Raimundo esté bien. “Genoveva, quiero esperarlo para saber si está bien”, dirá entre sollozos.
Pero la mujer será tajante: “Mire, si está bien o está mal, ya no es asunto suyo. ¡Así que váyase!”, cerrará, expulsándola de la casona y dejando en evidencia el quiebre definitivo entre ambas.