Julio César Rodríguez recibió en vivo un inusual audio de un reo mientras analizaba la actividad de presos en redes sociales desde la cárcel.
Un momento inesperado se vivió la mañana de este jueves en “Contigo en la Mañana”, cuando Julio César Rodríguez fue interrumpido por un insólito mensaje de voz proveniente, aparentemente, desde el interior de una cárcel chilena.
El matinal de Chilevisión analizaba diversos videos publicados por reclusos en redes sociales, donde se evidenciaba el acceso a celulares y televisores al interior de los penales. La conversación giraba en torno a los registros que mostraban a delincuentes grabando desde prisión, incluso luego de los incidentes en que intentaron incendiar la celda de uno de los acusados por la muerte de un niño en Recoleta.
El momento del audio: “Paren las prensas, paren las prensas”
En medio del debate, Julio César detuvo el programa tras recibir un mensaje en su propio WhatsApp, que, según explicó, habría sido enviado por un interno. Con tono sorprendido, dijo entre risas: “Paren las prensas, paren las prensas, por favor”, anticipando el contenido del mensaje.
El comunicador procedió a leer la transcripción del audio que acababa de llegarle: “JC, te lo grabé recién aquí en la galería 5 ‘choro’”, comentó, mientras el resto del panel reaccionaba atónito.
Segundos después, Rodríguez reprodujo el audio en vivo, donde se escuchaba una voz masculina decir: “JC, Julio Rodríguez, de hoy día maldito culi… Aquí en la peni, en la galería cinco. Qué pasa, soy yo el de la Pincoya”.
La aclaración en el estudio
Pese a la sorpresa inicial, el equipo del matinal aclaró rápidamente que se trataba de una escenificación realizada dentro del programa, cuyo objetivo era visibilizar y analizar el preocupante acceso de los reos a dispositivos tecnológicos desde el interior de las cárceles.
Julio César Rodríguez explicó que el ejercicio buscaba graficar la magnitud del problema que enfrenta el sistema penitenciario chileno, donde la circulación de celulares y redes sociales entre los internos sigue siendo una práctica habitual pese a los controles existentes.
Con humor y reflexión, el periodista cerró el momento subrayando la gravedad del tema: la capacidad de comunicación de los reclusos desde prisión continúa generando inquietud tanto en la opinión pública como en las autoridades.