China Suárez y Benjamín Vicuña reavivan tensiones tras declaraciones cruzadas que habrían afectado al actor chileno.
Las declaraciones cruzadas entre China Suárez y Benjamín Vicuña volvieron a poner en el centro de la conversación pública a la expareja, esta vez por revelaciones personales que generaron preocupación en el entorno del actor chileno.
Las duras palabras de China Suárez sobre su relación pasada
En una entrevista reciente, la actriz argentina fue tajante al hablar de la relación que mantuvo con Vicuña, asegurando que vivió un periodo emocionalmente complejo.
En el programa Otro Día Perdido, Suárez comentó:
“Yo estaba bajo tierra. Estaba en una relación en la que no me sentía deseada, no me sentía amada. Ya estaba muy desgastada”.
La respuesta de Benjamín Vicuña
Consultado por estos dichos, el intérprete chileno respondió con distancia, aunque dejando ver su molestia.
“No hay mucha más vuelta que dar, de verdad. Me parece muy triste, nada más, súper triste”, expresó.
Preocupación por el estado anímico del actor
La polémica no habría dejado indiferente al círculo cercano de Vicuña. Según reveló la periodista argentina Yanina Latorre, el actor estaría atravesando un momento complicado tras las declaraciones de su expareja.
“Muy deprimido, muy caído”
Durante su programa, Latorre afirmó haber recibido información directa del entorno del chileno:
“Me llega un mensaje del entorno de Vicuña. Me dicen que está muy deprimido, que está muy caído, que tienen mucha preocupación por él, no está queriendo ni salir a la calle”, aseguró.
La comunicadora agregó que la situación sería más seria de lo que aparenta, señalando que Vicuña “tiene pocas ganas de grabar, la está pasando muy mal y ahora hasta chequea si hay prensa la salida porque no quiere hablar más”.
Un conflicto mediático que no baja en intensidad
Aunque ninguno de los dos protagonistas ha vuelto a referirse al tema públicamente, la controversia sigue generando repercusiones en programas de entretenimiento y redes sociales, al tiempo que el actor intenta sobrellevar la presión mediática.

