¡IMPACTO! Metallica se querella contra artesana de Puerto Varas y todo por este insólito detalle
Una artesana chilena enfrenta una querella de Metallica por miniaturas musicales. El caso recuerda a “Miel Gibson” y sorprende por sus inesperados detalles
Un insólito caso está generando conversación en el sur del país y trae a la memoria lo ocurrido con “Miel Gibson”. Los representantes legales de Metallica en Chile interpusieron una querella contra una artesana de Puerto Varas, acusándola de vulnerar la ley de propiedad intelectual.
El origen del conflicto: miniaturas y marcas retenidas por Aduanas
Según los antecedentes, la acción legal comenzó en marzo, cuando Aduanas de Valparaíso retuvo un envío con 53 artículos. Dentro del paquete habían réplicas en miniatura de instrumentos y accesorios asociados a la banda, todos con marcas registradas.
De acuerdo con una publicación del diario El Llanquihue, la querella está dirigida contra la Sociedad Comercial Frecuencia Rock Spa, una tienda local dedicada a la venta de artículos musicales, como instrumentos miniatura y llaveros, algunos de ellos con la marca “Metallica”.
Entre los objetos incautados figuraban guitarras inspiradas en modelos icónicos como el “eet fuk”, la ESP MX 250 de James Hetfield y la reconocida Ouija de Kirk Hammett.
El recuerdo del caso “Miel Gibson” vuelve a la conversación
La situación recordó de inmediato el mediático caso de “Miel Gibson”, donde su creadora confesó que “Pensé que me iría presa” tras enfrentar acciones legales ligadas al nombre del actor.
La defensa de la artesana: “Quería alejar a los niños del reggaetón”
Claudia Lagos, representante de la sociedad querellada y artesana responsable de los productos, aseguró que todo se trató de un error en el proceso de importación.
“Cuando los pedí al país de origen los solicité sin la marca, pero lamentablemente se equivocaron”, explicó.
Según detalló, la empresa proveedora “emitió una carta de consideración de error”, documento mencionado por Radio Cooperativa.
La artesana afirmó que su intención nunca fue perjudicar a la banda estadounidense, sino fomentar el gusto por la música en nuevas generaciones.
“Mi interés con esta tienda siempre fue acercar a los niños y a los jóvenes a que aprendieran del rock y alejarlos del reggaetón”, expresó, enfatizando que jamás buscó infringir derechos de propiedad intelectual.
