“Decía que yo era una ma…, una pu…”: el duro testimonio de Nabila Rifo tras la libertad de Mauricio Ortega
A ocho años del brutal ataque, el agresor de Nabila Rifo obtuvo libertad condicional, decisión que el Gobierno anunció que apelará.
La liberación de Mauricio Ortega, responsable del violento ataque que conmocionó a Chile en 2016, volvió a encender el debate sobre la justicia y la violencia de género. La decisión fue adoptada por la Comisión de Libertades Condicionales de la Corte de Apelaciones de Coyhaique, tras revisar las solicitudes de 35 internos que buscaban el beneficio.
La polémica decisión judicial
Entre los beneficiados se encontraba Ortega, quien fue condenado en julio de 2017 a 18 años de presidio por el ataque contra su expareja, Nabila Rifo. La agresión, ocurrida el 14 de mayo de 2016, se transformó en uno de los casos más estremecedores del país.
Según los antecedentes judiciales, Ortega golpeó brutalmente a Nabila y, en medio de la violencia, le arrancó los globos oculares, dejándola con secuelas irreversibles.
Reacción del Gobierno ante la medida
Desde el Ejecutivo reaccionaron con molestia y anunciaron que apelarán la decisión de otorgar la libertad condicional, exigiendo que “se cumplan los años restantes de condena donde se debe y hemos solicitado medidas de protección” para resguardar la seguridad de la víctima.
Un caso marcado por contradicciones y horror
Durante el proceso judicial, Mauricio Ortega mantuvo su inocencia y hasta dio entrevistas en televisión para negar haber agredido físicamente a Nabila Rifo. Sin embargo, su relato estuvo lleno de inconsistencias que, sumadas al testimonio de la víctima, terminaron por derrumbar su versión.
En el juicio, Ortega declaró haber ingresado al domicilio que compartía con Nabila rompiendo la puerta con un hacha, aunque más tarde intentó rectificar sus palabras asegurando que “se había confundido”. Cuando fue consultado por su estado emocional durante el incidente, admitió que “estaba molesto”, contradiciendo su supuesto comportamiento “tranquilo”.
El testimonio de Nabila Rifo: un relato de sobrevivencia
En marzo de 2017, la víctima decidió declarar públicamente. Pidió que su testimonio fuera transmitido en vivo para que todo Chile conociera la verdad de lo ocurrido.
Nabila relató que con el paso del tiempo su pareja se volvió violenta y controladora, especialmente cuando consumía alcohol. “Era frío, calculador y me humillaba (…) Decía que yo era una maraca, una puta, porque trabajaba en restaurantes (…) Cuando dijo que ‘nunca más lo volvería a hacer’, le creí un poco, pero también conocía su genio, sabía dónde podía llegar”, recordó entre lágrimas.
Ante la decisión de otorgar libertad condicional al agresor de Nabila Rifo, he instruido a la directora @sernamegchile, Priscilla Carrasco, apelar a esta determinación para que se cumplan los años restantes de condena donde se debe y hemos solicitado medidas extra de protección. pic.twitter.com/vEV1SlwwfV
— Antonia Orellana (ella/she) (@totiorellanag) October 8, 2025
La noche del ataque
Según su testimonio, aquella noche comenzó con una reunión de amigos que terminó en tragedia. Ortega había bebido y, en medio de una discusión, comenzó a insultarla. Nabila intentó alejarse y dirigirse a la casa de su madre, pero él la siguió hasta la calle.
Fue entonces cuando “siento que Mauricio me pega en la cabeza con una piedra muy grande. Con el golpe caí al pasto y él me siguió pegando. Me hice la muerta para que no me siguiera pegando, de ahí perdí la consciencia y no recuerdo nada más”, narró con estremecedora precisión.
Un fallo que reabre heridas
La decisión de liberar a Ortega reaviva las heridas de un caso que marcó a Chile y puso el foco en la violencia contra las mujeres. Mientras el Gobierno busca revertir la medida, la sociedad vuelve a preguntarse si la justicia realmente protege a las víctimas o les obliga a revivir su dolor una y otra vez.