Los trabajadores que hayan quedado cesantes tienen derecho a una serie de beneficios, que les ayudarán a sobrellevar su situación actual.
Para acceder a alguna de las ayudas, los usuarios deben haber notificado que han quedado sin empleo al Fondo Nacional de Salud (Fonasa) o a las Instituciones de Salud Previsional (Isapre).
Aquellos que estén afiliados a las Isapre y se les dificulte mantener su plan, pueden cambiarse al Fonasa.
Tres beneficios para los cesantes
1.- Seguro de cesantía
Tienen derecho al Seguro de cesantía aquellos trabajadores dependientes con contrato indefinido, a plazo fijo, los que están por obra o servicio, que firmaron su contrato laboral posterior a octubre de 2002.
Asimismo, desde octubre de 2020, los empleados de casa particular, también pueden recibir este beneficio.
Luego de que la persona culmina su relación de trabajo, puede retirar, mensualmente, el dinero acumulado en esta cuenta.
Los interesados deben cumplir con ciertos requisitos y solicitar el dinero en el sitio de la Administradora de Fondos de Cesantía (AFC).
Cabe a destacar, que los que acceden al Seguro de Cesantía son quienes mantienen sus beneficios de salud a través de Fonasa.
2.- Fondo de Cesantía Solidario
El Fondo de Cesantía Solidario (FCS) es para los afiliados a la AFC que no tiene suficientes recursos en su cuenta por cesantía, tras quedar sin trabajo. También es para aquellos que agotaron sus fondos del Seguro de Cesantía.
Los usuarios tienen que cumplir con varios requisitos, como: activar una cuenta en la Bolsa Nacional de Empleo (BNE), para poder acceder a este fondo.
3.- Subsidio de Cesantía
Los empleados que no tienen derecho al Seguro de Cesantía podrán recibir una ayuda económica mensual, durante un año.
Este beneficio también brinda asistencia médica gratuita, y acceso a la Asignación Familiar, Maternal, y por muerte.
Por último, el subsidio se debe solicitar ante la institución previsional que corresponda al trabajador, ya sea el IPS o caja de compensación.
