Próximamente, Chile experimentará el fenómeno conocido como El Niño, según los últimos informes climáticos.
Este fenómeno, caracterizado por altas temperaturas y originado en el centro y este del Pacífico ecuatorial, tiene un impacto en la estabilidad del aire, la circulación atmosférica y la transferencia de calor, lo que afecta el patrón de lluvias, explica el Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno de El Niño (CIIFEN).
De acuerdo con el Laboratorio Oceanográfico y Meteorológico del Atlántico (AOML), este fenómeno se atribuye al aumento de los gases de efecto invernadero, lo que provoca un significativo incremento en las precipitaciones y la temperatura global.
Entonces ocurre que “la atmósfera también se calienta, favoreciendo el ascenso de aire cálido y húmedo, formándose nubes que se traducen en lluvias intensas”, explica MeteoRed.
Efectos de El Niño en Chile
El fenómeno de El Niño ocasiona un incremento tanto en la temperatura del mar como en las precipitaciones, abarcando desde la zona norte hasta el centro del país y afectando tanto las áreas costeras como las del altiplano, según señala la ONG Oceana.
Además, se prevé que el fenómeno se manifieste durante los meses de junio, julio y agosto, aunque aún no se puede determinar su duración exacta.
“En junio los sistemas frontales dejarían más lluvias entre la Región de O´Higgins y la Región de Los Lagos. Dentro de este tramo geográfico, los montos de agua caída más elevados se concentrarían entre la Región de La Araucanía y la Región de Los Ríos”, afirman desde MeteoRed.
En cuanto a las condiciones climáticas, se espera que haya precipitaciones frecuentes en las regiones de Valparaíso, Maule y La Araucanía.
Por otro lado, las regiones de Los Lagos y Magallanes tendrán un nivel de lluvias por debajo de lo habitual para el mes de agosto. En contraste, en las regiones de Arica y Parinacota hasta Antofagasta se experimentarán episodios de altas temperaturas.
