Camila Gómez lleva 13 días caminando hacia La Moneda para adquirir un tratamiento caro para su hijo Tomás, quien padece de distrofia muscular de Duchenne. Inició su viaje en Chiloé y pretende cubrir 1.300 kilómetros hasta Santiago para entregar una carta al presidente Gabriel Boric, solicitando apoyo y mayor conocimiento sobre esta enfermedad.

Durante su ruta, Camila ha sido apoyada por numerosas personas que la reciben y acompañan en las diversas ciudades y lugares que atraviesa.

No obstante, el momento más sorpresivo fue el viernes pasado en Temuco, cuando su hijo le hizo una visita inesperada para entregarle un ramo de flores.

Con motivo del Día de la Madre, el niño de cinco años apareció junto a su padre, Alex Ross, para abrazar a su madre.

El conmovedor encuentro fue compartido en redes sociales, mostrando el abrazo entre Camila y Tomás.

Además, el niño se dirigió a la audiencia con un micrófono, recibiendo aplausos de los presentes.

“Hola, yo soy Tomás. Estoy juntando platita para comprarme mi remedio”, expresó el pequeño.

Su objetivo es alcanzar 3.500 millones de pesos para comprar el fármaco llamado Elevidys, esencial para luchar contra su condición y que debe ser suministrado antes de cumplir 6 años.

Hasta ahora, han logrado recaudar aproximadamente $2.000 millones mediante donaciones en su cuenta corriente.

 

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