Temporada de tornados ya comenzó en Chile: ¿Dónde se concentran y qué dicen los expertos?
Especialistas explican por qué mayo y junio son los meses con más tornados en Chile y qué condiciones favorecen su aparición.
Aunque los tornados no son fenómenos comunes en Chile, su aparición se da ocasionalmente durante todo el año. Sin embargo, según expertos, existe una época en particular en la que su presencia es más recurrente: los meses de mayo y junio.
El meteorólogo José Vicencio aclaró que “ya tenemos esta idea de que mayo y junio es la época de mayor frecuencia”, debido a condiciones climáticas propicias para su formación.
¿Qué tan intensos pueden ser los tornados en Chile?
Vicencio comentó que, si bien la magnitud de los tornados registrados en el país no se compara con los devastadores ciclones que se producen en Estados Unidos, esto no significa que no sean peligrosos. “No significa que los tornados no puedan ser destructivos o dañinos”, enfatizó, recordando los severos daños causados por los tornados que azotaron a la región del Biobío en mayo de 2019.
Dicho evento dejó una persona fallecida, varios heridos y serios daños en viviendas, automóviles e infraestructura pública.
Zonas con mayor riesgo de tornados
¿Dónde ocurren con más frecuencia?
Los tornados suelen concentrarse en el sur y centro-sur del país, principalmente durante el otoño. Jaime Leyton, meteorólogo de Megatiempo, detalló que estas formaciones se observan principalmente entre la región de Ñuble y la región de Los Ríos.
“Más hacia el sur es más difícil porque el aire no es lo suficientemente inestable y hay la fuerte influencia de la corriente de Humboldt que le quita desarrollo vertical a la nubosidad”, explicó el especialista.
Además, Leyton indicó que en los últimos años se ha notado un incremento en la ocurrencia de estos fenómenos.
¿Cómo se origina un tornado?
El papel de las nubes de tormenta
Para entender el proceso de formación de un tornado o tromba marina, la meteoróloga Laura Batista explicó que el tipo de nubosidad conocida como cumulonimbus es el elemento clave.
“Nubes cuya base puede estar solo un kilómetro de nuestras cabezas, pero que su gran desarrollo vertical puede llegar al techo de la troposfera a unos 10 kilómetros o más de altura”, explicó.
Este tipo de nubes se caracteriza por la interacción de masas de aire caliente ascendiendo y aire frío descendiendo, lo que genera tormentas eléctricas, granizos y, en algunos casos, la formación de tornados. “Mientras, en la parte inferior, desemboca en el tornado o tromba marina”, puntualizó.