El reconocido actor Juan Pablo Sáez, conocido por su participación en la recordada teleserie Adrenalina, enfrenta serias acusaciones que lo vinculan a un episodio de violencia intrafamiliar. El hecho involucró a su expareja Camille Caignard, y terminó con ambos detenidos el pasado sábado.

Durante la audiencia de control, Sáez fue liberado, aunque quedó con la medida cautelar de no acercarse ni comunicarse con la presunta víctima.

Origen del conflicto: la custodia de una menor

Fue Tomás Brass, hijo de Camille, quien rompió el silencio este domingo en el programa Primer Plano. Allí reveló que el conflicto habría estallado a raíz de una disputa por la custodia de su hermana de 12 años.

Además, aseguró que ese mismo día el actor habría ordenado el desalojo de su madre y su hermana desde el hogar que anteriormente compartieron. Según relató, el abogado de Sáez llegó cerca de las 20:30 horas con una orden legal para concretar la salida forzada.

Denuncias de agresiones y cuestionamientos a las declaraciones del actor

En la entrevista, Tomás refutó duramente las declaraciones del actor, quien habría dicho que las lesiones de Camille eran antiguas y no producto de una agresión. “Mi mamá se cayó y se lesionó jugando con mi hermana, y eso tiene una fecha que está corroborado cuando se atendió en la clínica. Si va a estar diciendo que eso es lo que pasó ayer, ridículo compadre”, expresó con evidente molestia.

Acusación de ahorcamiento y pruebas gráficas no mostradas

El joven también aseguró que las lesiones recientes de su madre se deberían a un ahorcamiento perpetrado por Sáez. Incluso solicitó en el programa que se exhibieran las imágenes que, según él, comprobarían la agresión.

Sin embargo, el conductor Julio César Rodríguez explicó que, aunque contaban con las fotografías, “no las vamos a mostrar por respeto a tu propia madre y a tu hermana, mejor que no”, dejando en claro que existía material de respaldo, pero que se decidió no difundirlo públicamente.

Tomás Brass cuestiona la actitud del actor

Para concluir, Tomás justificó su decisión de hablar públicamente y criticó duramente la postura del actor tras salir de la audiencia. “Me da mucha rabia ver cómo Juan Pablo se lava las manos, cómo sale sonriendo de la audiencia, porque Juan Pablo Sáez, cuando ve una cámara, se pone contento, le encanta”, dijo.

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“Cuando llegaron (los medios de comunicación), él dijo: ‘Para esto hay cámaras, pero cuando presento una obra no llegan muchos’. A él le encanta eso, es una persona narcisista, le encanta y al final verlo lavarse las manos de esa forma, no me aparece”, concluyó Tomás con evidente indignación.