La construcción de un estadio para el equipo Universidad de Chile ha sido un asunto de gran sensibilidad para sus seguidores, llegando incluso a ser objeto de burlas infundadas en diversos ámbitos.
A lo largo de su historia, se han planteado maquetas y numerosas ideas para hacer realidad este sueño. A principios de 2023, Azul Azul brindó algunas señales al adquirir un terreno en la comuna de Lampa, en la zona norte de la Región Metropolitana, lo cual infundió cierto optimismo.
Sin embargo, a medida que avanzamos hacia agosto, la información sobre el tan esperado estadio para el club aún sigue siendo escasa, dejando a los seguidores del romántico viajero en la incertidumbre.
Mientras los aficionados continúan manteniendo sus sueños intactos, la inteligencia artificial nos brinda una visión de cómo podría ser este anhelado recinto deportivo.
“El creador de imágenes que Microsoft implementó en Bing, basado en Dall-E, muestra diferentes recintos, algunos parecidos a los que existen en Estados Unidos o Europa, con capacidad sobre los 60 mil asistentes, además de techo y con alta tecnología”, informaron desde La Tercera.
Además, se pueden encontrar imágenes de estadios que se asemejan más a los que se encuentran en diversas naciones sudamericanas, caracterizados por un diseño sencillo y ausente de exhibiciones tecnológicas ostentosas.
¿Existe la viabilidad de llevar a cabo la construcción de estos estadios?
No obstante, de acuerdo a lo expresado por Cristóbal Bañados, quien es arquitecto en Forni & Fortes Arquitectos y también ejerce como profesor en la Universidad de Chile, en sus declaraciones al medio mencionado: “Todos estos recintos pueden realizarse, ya que no tienen una dificultad arquitectónica, además que la IA usa estadios reales como referencias. Yo creo que hay temas de escala, porque hay imágenes que son de ligas europeas, es decir, gigantescos, que no dan para un club chileno, pues con suerte lo llenarían una vez al año”.
El experto también abordó dificultades como el elevado costo de adquirir un terreno de tal magnitud en Santiago, además de la disminución gradual de lugares aptos para llevar a cabo proyectos de gran envergadura.
Esto se debe a su perspectiva de que construir un estadio en las periferias de la ciudad no resulta particularmente factible, ya que instalaciones de gran capacidad requieren una conectividad adecuada. En el caso de Lampa, la ubicación no resulta atractiva para el equipo en cuestión.
