Colo Colo vive días agitados tanto dentro como fuera de la cancha. A la crisis deportiva que atraviesa el club, ahora se suma una acusación de indisciplina que ha generado revuelo y pone en entredicho la gestión de Aníbal Mosa al mando de Blanco y Negro.

Escort y desorden: la fuerte acusación que sacude al Cacique

El periodista Mauricio Israel encendió la polémica este fin de semana en el programa Círculo Central, al denunciar un supuesto acto de indisciplina ocurrido en la pretemporada del Cacique.

“Hubo escorts en los hoteles de concentración de Colo Colo, con conocimiento y autorización de Aníbal Mosa. Es muy grave que entren prostitutas”, disparó sin filtro el comunicador, señalando que estos hechos habrían sucedido con total conocimiento de la dirigencia.

Más acusaciones contra la administración

Israel fue más allá. Afirmó que Mosa habría retrasado entrenamientos para proteger a jugadores con sobrepeso, quienes serían al menos seis dentro del plantel actual. Además, aseguró que existe una fractura interna en el camarín, con conflictos entre referentes que estarían afectando el ambiente del equipo.

Estas denuncias llegan justo cuando Colo Colo quedó eliminado de la Copa Libertadores, fuera de la Copa Chile y con un rendimiento irregular en el Campeonato Nacional.

Óscar Opazo rompe el silencio y responde

Tras el empate 2-2 ante Ñublense, el único jugador que habló con la prensa fue Óscar Opazo, quien salió a desmentir las acusaciones y a defender la interna del plantel.

“Sabemos que salieron mil noticias pero tratamos de no pescar”, dijo el lateral, dejando claro que el equipo está al tanto del revuelo mediático, pero que prefieren enfocarse en lo futbolístico.

“Colo Colo es el más grande de Chile y vende más cuando anda mal. Hablamos entre los más grandes y cerramos fila. Hay muchos medios que sacan información falsa”, agregó, en defensa del grupo.

También se refirió a la supuesta división con Jorge Almirón, asegurando que el vestuario sigue unido.

“No hay ningún problema con el entrenador”, sentenció.

La polémica recién comienza y amenaza con seguir creciendo si no hay una respuesta oficial por parte de la dirigencia. Mientras tanto, Colo Colo sigue sin encontrar la calma en una temporada que ya se le fue cuesta arriba.