La señora Ana Mendoza, quien se desempeñaba como asesora del hogar en la casa de Luciano Cruz-Coke y su esposa, Javiera García-Huidobro, denunció irregularidades en su despido.
La mujer relató que dejó ir a trabajar cuando su empleadora se contagiara de COVID-19 en marzo de 2020. Luego, el gobierno decretó cuarentena, por lo que no retomó sus funciones en ese momento.
El caso fue dado a conocer la noche de este miércoles en Chilevisión Noticias, donde Mendoza aseguró que recibió constantes solicitudes para ir a trabajar de manera presencial.
“(García-Huidobro) empezó a acosarme por teléfono, y me dijo que tenía que ir, que son mentiras (…), fue un acoso durante los cinco meses que duró la pandemia”, expresó.
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Igualmente denunció que “el sueldo de marzo me lo pagó en junio”.
Siguiendo su relato, la asesora del hogar dijo que decidió regresar a su pega en la casa del parlamentario cuando se levantó la cuarentena. Luego contó que a los días fue despedida.
Por lo anterior, Mendoza inició una demanda donde acusa posibles incumplimientos como remuneraciones impagas, vacaciones pendientes, retraso en pago de cotizaciones, no entrega de liquidaciones, incumplimiento de hora de colación, despido injustificado y no entrega de finiquito.
Estas acusaciones deberán ser probadas en tribunales, se aclara en La Cuarta.
En su relato, Mendoza también dijo que debió acogerse a sus 10 % para cubrir sus gastos durante los meses que no recibió el suelo.
La abogada de García-Huidobro fue contactada y explicó a través de un comunicado que el caso está en manos de la justicia.
El citado medio refiere que este jueves se llevará a cabo una audiencia de conciliación.
