Una mujer fue condenada a 7 años de prisión por el Juzgado de Primera Instancia Oral en lo Penal de Antofagasta por el delito de parricidio frustrado en perjuicio de su hija.
El hecho ocurrió en la capital regional en febrero de 2022 cuando una mujer de iniciales M.B intentó apuñalar y matar al menor con una almohada.
El tribunal la declaró culpable de ser autora de parricidio frustrado en una decisión unánime.
También se estableció la incapacidad del delincuente para acercarse a la víctima después de su salida de prisión. Por un período de dos años, esto puede hacerse en su residencia, lugar de trabajo o donde se encuentre su hija dentro de un radio de 200 metros.
El fallo del tribunal determinó que los hechos ocurrieron en la noche de un día no especificado durante la tercera semana de febrero de 2022.
En ese caso, la niña, menor de 10 años, y su madre, la imputada de iniciales M, dormían en una cama de la estructura alojada en el Campamento Mirador Alto de Antofagasta.
“Esta última procedió a ponerle una almohada en la cara a la víctima, intentando inmovilizarla para luego con un cuchillo comenzar a apuñalarla en reiteradas ocasiones, mientras le decía ‘contigo hasta la muerte’”, expone el fallo.
Después de lo que acaba de pasar, la chica hizo un esfuerzo por defenderse y le rogó que no la matara. El menor sufrió numerosas lesiones graves como resultado de estos incidentes.
Entre las lesiones sufridas por el brutal ataque, se encuentran: una herida cortopunzante cervical, una herida cortopunzante penetrante torácica anterior con hemoneumotórax y una herida cortante en el dorso de la mano. Todas estas lesiones fueron ocasionadas en la parte izquierda.
Además, la víctima no fue trasladada a un centro de atención hasta el 21 de febrero a partir de la fecha del incidente, a pesar de las graves lesiones de la mujer.
Luego de ser ingresada al Hospital Militar, fue derivada por Ley de Urgencias al Hospital Regional de Antofagasta.
Allí se reveló la gravedad de sus heridas y que la mantenían bajo riesgo vital. “De no haber mediado intervención médica, le hubiera provocado la muerte. Heridas que eran compatibles con la acción de terceros”, detalla el texto.
Simultáneamente, a la imputada se le otorgaron las herramientas legales de inhabilitación absoluta y perpetua para el empleo, cargo público y derechos políticos. Del mismo modo, mientras dure la sentencia, las profesiones titulares quedan totalmente inhabilitadas.
Finalmente, el tribunal ordenó que luego de ejecutada la decisión, se tome una muestra biológica de la persona sentenciada para determinar su huella genética e incorporarla al registro nacional de ADN de personas condenadas.
