Anuncian que un conocido volcán del sur de Chile podría entrar en erupción en los próximos 100 años
Científicos estiman que el volcán Lonquimay podría volver a entrar en erupción dentro de los próximos 100 años.
Un grupo internacional de científicos proyectó que el volcán Lonquimay podría registrar una nueva erupción en los próximos 100 años. La conclusión se desprende de una extensa investigación realizada por expertos de Chile, Ecuador, Francia, Inglaterra y República Checa, quienes analizaron la actividad eruptiva del macizo durante miles de años.
Un estudio que abarca 5.500 años de historia volcánica
Entre 2021 y 2024, los investigadores desarrollaron un completo estudio sobre el pasado del Complejo Volcánico Lonquimay, ubicado en la región de La Araucanía. El trabajo incluyó entrevistas a los habitantes de la zona, con el objetivo de responder sus inquietudes y entender cómo ha evolucionado la actividad del lugar.
El análisis permitió determinar que, en los últimos 5.500 años, el Lonquimay ha tenido 17 erupciones, siendo la más reciente la ocurrida entre 1988 y 1990, cuando se formó el conocido cono Navidad.
La frecuencia de las erupciones y la probabilidad futura
Según el investigador de la Universidad de O’Higgins, Jorge Romero, el volcán presenta una recurrencia promedio de una erupción cada 330 años, lo que sugiere que podría volver a activarse dentro del próximo siglo.
Romero explicó que la probabilidad de una nueva erupción en ese período fluctúa entre el 30% y el 60%, aunque enfatizó que, por ahora, el macizo se mantiene “tranquilo”.
Actividad reciente y nivel de riesgo
El especialista recordó que la última crisis volcánica se produjo en 2022, cuando una serie de movimientos sísmicos motivaron a las autoridades a decretar Alerta Amarilla en la zona.
Pese a aquello, las erupciones del Lonquimay suelen ser moderadas, similares a las del volcán Calbuco en la región de Los Lagos o a las del Villarrica, caracterizadas por expulsión de cenizas, material fragmentado y piedras pómez.
Un monitoreo constante para anticipar escenarios
Los investigadores señalaron que este tipo de estudios son fundamentales para prevenir riesgos y fortalecer la vigilancia volcánica. Gracias a los nuevos datos, se podrá mejorar la capacidad de respuesta ante un eventual episodio eruptivo en el futuro.
