La amenaza de un posible paro de jugadores, impulsada por el Sindicato de Futbolistas Profesionales (SIFUP), se ha encontrado con una traba importante que podría dificultar su implementación durante la Supercopa de Chile.

El presidente del SIFUP, Gamadiel García, había propuesto que el partido de la Supercopa programado para el 11 de febrero en el Estadio Nacional no se llevara a cabo como medida de presión por el aumento de cupos extranjeros en el fútbol chileno. Sin embargo, esta propuesta ha sido rechazada por los dos equipos participantes, Colo Colo y Huachipato.

Según informó el diario La Tercera, los capitanes de ambos equipos, Claudio Sepúlveda de Huachipato y Esteban Pavez de Colo Colo, manifestaron que “se presentarán a ese encuentro, que también es la postura institucional previamente conversada”.

La negativa de Colo Colo y Huachipato a boicotear la Supercopa se debe, en parte, a que ambos equipos consideran importante jugar para mantener su preparación y rodaje de cara a competiciones como la Copa Libertadores.

Esta decisión de los dos clubes implica que el SIFUP tendrá que considerar sus próximos pasos en la Asamblea Extraordinaria de futbolistas convocada para el 6 de febrero. A su vez, la actitud de Colo Colo y Huachipato le otorga tiempo adicional a la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) para negociar un acuerdo que permita el inicio sin problemas del torneo 2024 el 16 de febrero.

La Supercopa de Chile entre Colo Colo y Huachipato se llevará a cabo como estaba programada, a pesar de la amenaza de paro de jugadores promovida por el SIFUP.