Una tensa confrontación tuvo lugar en la mañana de este miércoles en la Cámara de Diputados entre las diputadas comunistas Lorena Pizarro y Alejandra Placencia, y la parlamentaria republicana Chiara Barchiesi. La discusión se originó a raíz de la contratación del excarabinero Sebastián Zamora Soto para realizar labores administrativas en el recinto legislativo, a pesar de haber sido formalizado por el delito de homicidio frustrado de un adolescente en el Puente Pío Nono, en la región Metropolitana.

Según relatos de los presentes, el encontrón ocurrió en el Hall El Pensador y continuó en los pasillos de la Cámara.

Acusan a Chiara Barchiesi de utilizar términos despectivos

Las diputadas comunistas acusaron a Barchiesi de utilizar términos despectivos para referirse a ellas, tildándolas de “comunistas, levantadas de raja”.

La diputada Lorena Pizarro expresó su preocupación por la impunidad que, según ella, representa la contratación de Zamora, quien está siendo juzgado por un grave delito. Asimismo, destacó que los comunistas tienen representación popular y se encuentran en el Congreso legítimamente. “Y ella, en un diálogo entre diputadas comunistas que estamos acá, nos increpó y se refirió a nosotras como ‘comunistas, levantadas de raja’. Textuales palabras”, contó.

Barchiesi respondió acusando a sus colegas comunistas de “matonaje”

En respuesta a lo sucedido, la diputada Pizarro anunció que llevará el caso a la Comisión de Ética, buscando que no quede impune esta situación que considera un acto de violencia verbal. Sin embargo, Barchiesi respondió acusando a sus colegas comunistas de “matonaje” por confrontarla y emplazarla por la contratación de Zamora, alegando que no existe una definición judicial definitiva en el caso y que Pizarro faltaría a la verdad al hablar de impunidad.

El diputado republicano Agustín Romero también se sumó a la controversia, acusando a las diputadas comunistas de realizar una “encerrona” a Barchiesi, señalando que su partido ha sido objeto de agresiones y ataques en diversas ocasiones.

El caso ha generado polémica y expectación en el Congreso, y el enfrentamiento entre las parlamentarias ha avivado el debate en torno a la contratación de personas involucradas en procesos judiciales en cargos públicos. La Comisión de Ética deberá revisar las acusaciones y determinar si existieron faltas éticas o de comportamiento en esta situación.